Seguidores

viernes, 1 de julio de 2016

La Paz.









 Muchas veces oímos hablar de la PAZ. Y como cristianos nos preguntamos; ¿Qué es la paz?
Buscando alguna reflexión  sobre el tema encontré este pequeño fragmento que me pareció interesante; lo comparto con ustedes.


Palabra de Dios.
5 En cualquier casa donde entréis, primeramente decid: Paz sea a esta casa.
 6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; y si no, se volverá a vosotros.
Lucas 10, 5-6.

Reflexión:
Lo «primero» que han de comunicar sus discípulos al entrar en una casa es :«Paz a esta ca sa».
La paz es la primera señal del Reino de Dios. Si la Iglesia no introduce paz en la conviven-cia, los cristianos estamos anulando de raíz nuestra primera tarea.                                                                                                                                                      
   Esta paz nace de la confianza total en Dios y afecta al centro mismo de la persona, por eso no depende solo de circunstancias  externas. Es una  paz  que brota  en el corazón, va invadiendo   gradualmente a  toda  la persona  y desde  ella se extiende a los demás.
La paz es  regalo de  Dios, pero también fruto de un gran trabajo. Acoger la paz de Dios, guardarla fielmente en el corazón, mantenerla en medio de los conflictos y contagiarla a los demás exige el esfuerzo  apasionante de unificar la vida desde Dios.           

Fragmento extraído de una homilía de Fray Marcos Rodríguez Robles, sacerdote de la orden dominica (Orden de los Predicadores).
                                                                                                                                           



8 comentarios:

  1. Mi querida Rosa, casi no abro el ordenador a ver si puedo recuperar algo mi delicada salud.
    La humanidad ha perdido muchos valores humanos y el sentido de la paz se ha convertido simplemente en que no hayan guerras. Hay que recomponer a la humanidad para que encuentre la paz interior, sin ella no es posible un cambio espiritual que genere paz en cada hogar y de allí se expanda al entorno donde vive, traspasando fronteras.
    Si tuviésemos paz interior, la misericordia saldría por doquier y entre otras muchas cosas, no habrían pobres-
    Te dejo un gran beso de ternura
    Sor. Cecilia

    ResponderEliminar
  2. Encontrar la paz es como llegar a la sabiduría, un gran trabajo, Rosa, un abrazo!

    ResponderEliminar
  3. Lo cierto que tan solo deseamos la paz en la misa, pero la tendríamos que usar mucho más a menudo en los encuentros, aunque sería un poco chocante en los tiempos que vivimos.
    Que la paz sea en ti.

    ResponderEliminar
  4. La paz debería de ser con em pan de cada día.Besicos

    ResponderEliminar
  5. Un hermoso post que nos hace reflexionar, amiga...La confianza en Dios nos llena el corazón de paz. Ojalá tengamos siempre el corazón lleno de luz y fuerza para seguir adelante, dando paz a los demás.
    Mi abrazo y mi cariño, amiga.
    M.Jesús

    ResponderEliminar
  6. ¡Hermoso Rosa ! La paz es la presencia de Dios
    en nuestras vidas. Un abrazo grande.

    ResponderEliminar
  7. Muchas, gracias,Cuando el poder del amor sea más grande que el amor al poder, el mundo conocerá la paz.

    ResponderEliminar
  8. que esa paz nos llene siempre
    porque esa es la única manera de caminar
    sembrando lo bueno en esta vida
    en la tormenta alimentarnos del amor de Dios
    que nos sostendrá en este caminar.

    ResponderEliminar