Muchas veces oímos hablar
de la PAZ. Y como cristianos nos preguntamos; ¿Qué es la paz?
Buscando
alguna reflexión sobre el tema encontré
este pequeño fragmento que me pareció interesante; lo comparto con ustedes.
Palabra
de Dios.
5 En cualquier casa donde entréis, primeramente
decid: Paz sea a esta casa.
6 Y si hubiere allí algún hijo de paz, vuestra paz reposará sobre
él; y si no, se volverá a vosotros.
Lucas
10, 5-6.
Reflexión:
Lo «primero» que han de comunicar sus discípulos al entrar en una casa
es :«Paz a esta ca sa».
La paz es la primera señal del Reino de Dios. Si la Iglesia no introduce paz
en la conviven-cia, los cristianos estamos anulando de raíz nuestra primera
tarea.
Esta paz nace de la confianza
total en Dios y afecta al centro mismo de la persona, por eso no depende solo
de circunstancias externas. Es una paz
que brota en el corazón, va
invadiendo gradualmente a toda
la persona y desde ella se extiende a los demás.
La paz es regalo de Dios, pero también fruto de un gran trabajo.
Acoger la paz de Dios, guardarla fielmente en el corazón, mantenerla en medio
de los conflictos y contagiarla a los demás exige el esfuerzo apasionante de unificar la vida desde
Dios.
Fragmento extraído de una homilía de Fray Marcos
Rodríguez Robles, sacerdote de la orden dominica (Orden de los Predicadores).
Mi querida Rosa, casi no abro el ordenador a ver si puedo recuperar algo mi delicada salud.
ResponderEliminarLa humanidad ha perdido muchos valores humanos y el sentido de la paz se ha convertido simplemente en que no hayan guerras. Hay que recomponer a la humanidad para que encuentre la paz interior, sin ella no es posible un cambio espiritual que genere paz en cada hogar y de allí se expanda al entorno donde vive, traspasando fronteras.
Si tuviésemos paz interior, la misericordia saldría por doquier y entre otras muchas cosas, no habrían pobres-
Te dejo un gran beso de ternura
Sor. Cecilia
Encontrar la paz es como llegar a la sabiduría, un gran trabajo, Rosa, un abrazo!
ResponderEliminarLo cierto que tan solo deseamos la paz en la misa, pero la tendríamos que usar mucho más a menudo en los encuentros, aunque sería un poco chocante en los tiempos que vivimos.
ResponderEliminarQue la paz sea en ti.
La paz debería de ser con em pan de cada día.Besicos
ResponderEliminarUn hermoso post que nos hace reflexionar, amiga...La confianza en Dios nos llena el corazón de paz. Ojalá tengamos siempre el corazón lleno de luz y fuerza para seguir adelante, dando paz a los demás.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño, amiga.
M.Jesús
¡Hermoso Rosa ! La paz es la presencia de Dios
ResponderEliminaren nuestras vidas. Un abrazo grande.
Muchas, gracias,Cuando el poder del amor sea más grande que el amor al poder, el mundo conocerá la paz.
ResponderEliminarque esa paz nos llene siempre
ResponderEliminarporque esa es la única manera de caminar
sembrando lo bueno en esta vida
en la tormenta alimentarnos del amor de Dios
que nos sostendrá en este caminar.